De cómo serían las películas del Oscar si fuesen venezolanas

Runrunes
Por Francisco Zambrano
Fecha: 24/02/2017

Imágenes editadas por @monkda92

La octagésima novena entrega de los premios Oscar son este domingo 26 en Los Ángeles y en Runrun.es nos preguntamos ¿Cómo serían los posters de las cintas nominadas a Mejor Película si se hubiesen filmado en Venezuela? Acá encontrarán la respuesta a la interrogante.

En este musical, el presidente y la primera dama bailan, cantan y aplauden mientras los venezolanos hacen cola para comprar comida y medicinas en una ciudad estrellada herencia de un caudillo galáctico. Todo en esta película parece una comparsa con melodías interpretadas por los violinistas del Titanic.

Desde una galaxia muy lejana llegaron las Cajas de los CLAP con contenido desconocido y sin un destinatario fijo, salvo que porte un carnet del Psuv. Así como el monolito de “2001, Odisea del Espacio” representaba una fuente de poder o ente de adoración, este cuadrado de cartón mantiene hipnotizada a toda una población.

En esta producción de acción y suspenso, un grupo de militares activos y retirados mantienen ocultas a una serie de figuras indispensables para su país. Es una historia de opresión que ojalá tenga un final feliz de reivindicación y recompensa para los habitantes de un pobre país suramericano.

En un país sin material para emitir pasaportes y con pasajes aéreos a precios exorbitantes prácticamente sus ciudadanos viven entre Fences (Barreras). Un Servicio de Extranjería colapsado, aerolíneas dolarizadas y sueldos insuficientes se conjugan para que los venezolanos subsistan en una especie de cárcel obligatoria y sin la posibilidad de viajar más allá de las fronteras.

Hasta el Último Kilo es la historia de un soldado que se negaba a dejar ni un gramo de arroz en las alacenas de los supermercados, con su uniforme que le permitía evadir las largas colas en los establecimientos, Ryan se echaba al hombro un par de sacos para llevarlos a su casa, por supuesto después de dejarle una porción a su superior.

Una mujer promete a los pobladores de una convulsionada ciudad que podrán bañarse en un contaminado río luego que este sea saneado, pero los años pasan y la corriente de agua sigue llena de porquerías y con incluso gente viviendo en sus riveras. Una tragedia borrascosa al estilo de “Lo que el viento se llevó” y “Río Místico”.