foto | ELADIO TORRES
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“Queremos trabajar en paz”, dicen las pancartas |
"Rechazamos de manera contundente el anuncio de la posible expropiación, ya que lo consideramos arbitrario y porque además viola el derecho y estabilidad del trabajo, el cual es el sustento de nuestras familias. Igualmente estamos en desacuerdo con las declaraciones ofrecidas por el alcalde a los medios, en las que anuncia que las plantas de Villa de Cura y la Agencia Santa Lucía de Pepsi-Cola Venezuela, podrían ser convertidas en empresas de producción social porque supuestamente no cumplen con sus compromisos laborales".
"Tales declaraciones no tienen fundamento -reza el escrito- ya que la empresa Pepsi-Cola Venezuela cumple puntualmente todas sus obligaciones laborales con los trabajadores. Además, los temas laborales con la empresa los estos conversando entre patrono y trabajadores. Queremos también decirle a la opinión pública que ya las afirmaciones y amenazas de expropiación de estas instalaciones están causando daño a nuestros familiares, amigos y vecinos, creando zozobra y preocupación por el destino de nuestra estabilidad laboral, ingresos y beneficios. Una medida como esa pone en riesgo más de 700 puestos de trabajo directos, más de 2.000 indirectos que actualmente hacemos vida en la planta y la agencia, repercutiendo en el bienestar de las comunidades vecinas".
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