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martes, 22 de mayo de 2012

EL SALDO DE LA GUERRA EN LA PLANTA


HUMBERTO PRADO - Tal Cual

Necesariamente debemos seguir escribiendo sobre los sucesos de la Casa de Reeducación y Trabajo Artesanal El Paraíso, mejor conocido como El Reten de La Planta.

Como nace este penal, según el resuelto de fecha 15 de julio de 1964, del Ministerio de Justicia, a través de la Dirección de Prisiones, se ponen en funcionamiento las instalaciones del inmueble ubicado en el sitio denominado Cuartel de la Planta, avenida Páez de El Paraíso en la ciudad de Caracas, que dispone de capacidad y servicios necesarios para la reclusión de individuos sometidos a medidas de seguridad, establecidas por la Ley de Vagos y Maleantes, se declara dicho establecimiento hábil como Casa de Reeducación y Trabajo Artesanal, y como Internado Judicial, anexo a la Cárcel Pública local, para la detención de procesados por los Tribunales de la Circunscripción Judicial del Distrito Federal y Estado Miranda y al cumplimiento de penas de prisión menores de un año para sentenciados por los mismo tribunales.

46 años pasaron desde la creación de este penal para albergar a 350 reclusos. Caracas tenía tres internados judiciales, a saber, Reten de Catia, Internado El Junquito y La Planta. Catia fue implosionado el 15 de marzo de 1997 y El Junquito fue cerrado por el año 2002, bajo la excusa que era necesario albergar a los ciudadanos que estaban bajo las Medidas Alternativas de Destacamento de Trabajo y Régimen Abierto y en el 2009 salen de ahí todos y los concentran en el edificio que esta al lado del Reten de la Planta, donde funciona el Centro Francisco Canestri y Padre Luis María Olaso, ya colapsados.

Ahora bien, la toma de la Planta comienza por el asesinato de la visitante María Teresa Marrero, de 21 años, que tenía seis meses de amores con el interno llamado Ender, autor del crimen, que después resulto acribillado por sus compañeros de infortunio. La joven deja dos niños, de 5 y 2 años de edad.

Estos hechos producen la decisión de que ese Internado Judicial sea clausurado y también la guerra, con la posición de la población penal de no ceder a la toma. Surge el denominado dialogo por parte del gobierno. El Ejecutivo insiste en que deben salir porque sí, era una decisión tomada. Hasta intervienen varios pranes de otros penales, junto con los internos de la Planta, para que cedieran su posición y serían recibidos sin problemas en esos penales.

Después de más 20 días de enfrentamientos, podemos decir que el saldo fue muy trágico, en vista de que murió el señor Henry Molina, de 48 años de edad, vecino del sector, al ser alcanzado por uno de los proyectiles y el interno Eduard Colmenares, de 27 años de edad, también fallecido, según lo confirmó su tía Maribel Revetti. Resultaron heridos los ciudadanos Hermes Peralta Martínez, de 35 años, que fue ingresado al Pérez Carreño, procedente de Parque Central; Carlos González, oficial de Policaracas, herido en el muslo izquierdo, ingresado a la clínica Vista Alegre; Denier Escalona, de 24 años, herido en la pantorrilla derecha y trasladado al centro asistencial; Wilmer Delgado Alcalá, de 32 años, herido en el intercostal derecho e ingresado al Hospital de Clínicas Caracas; Gladys Coromoto Rangel, de 47 años, herida en el muslo izquierdo e ingresada al Pérez Carreño; Nelson Viloria, herido en su fémur izquierdo e ingresado al Hospital Universitario de Caracas; Olmar Martínez, de 31 años, docente, herida con un disparo descendente en la espalda, sin salida; y el sargento GN II Edwin Méndez. ¿Valió la pena?

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