Filtraciones de aguas negras deterioraron calle Autopista del barrio 23 de Enero en Maracay

RAFAEL ORTEGA | el siglo
fotos | LUIS SÁNCHEZ

La calle Autopista del 23 de Enero está hecha un desastre

Ana María Suárez

José Manuel Calderón

Vecinos y dueños de comercios ubicados en las adyacencias de la calle Autopista de barrio 23 de Enero de Maracay tienen más de un año quejándose por todos los problemas que ha traído a la comunidad el rompimiento y desbordamiento de las tuberías de aguas negras.

Problemas de filtraciones de aguas negras causaron el hundimiento del asfalto y en consecuencia la abertura de un hueco en la referida calle del populoso sector maracayero.

Es por ello que los habitantes y comerciantes de la calle Autopista optaron por colocarle al cráter toda clase de elementos que fungen como advertencia para los conductores.

Uno de los vecinos de la zona, quien se identificó como José Manuel Calderón, denunció que en 2010 “medio repararon” el hueco, pero retornó con unos cincuenta centímetros de profundidad, lo que se convierte en peligro inminente dado lo transitado del lugar y el paso de vehículos pesados.

De igual manera, Bárbara Mendoza, quien habita frente a la falla, comentó que de por sí la zona es “roja” porque colinda con la Autopista Regional del Centro, el alumbrado público es deficiente y hay mucha maleza alrededor.

Los habitantes de la calle Autopista relataron que es una tortura cada vez que llueve, porque las aguas se desbordan y llegan hasta las aceras.

Ana María Suárez, comerciante del sector, dijo que desde hace más de un año viven en esta situación, cuando iniciaron las reparaciones del primer colector de aguas negras que ya se dañó nuevamente.

Denunció que este colector nunca fue reparado en su totalidad porque la calle y los restos de desperdicios de la construcción siempre quedaron en la vía.

Habitantes de la zona se quejaron de que nadie les ha dado respuesta, ya que la Alcaldía de Girardot alega que por el estado en el que se encuentra, este problema pasó a ser responsabilidad del Ministerio de Ambiente.

Los malos olores se han vuelto insoportables para los vecinos y comerciantes que habitan cerca, ya que representan un foco constante de contaminación y un espacio propicio para los criaderos de zancudos.

A esto se suma la inconsciencia de algunas personas que tiran desperdicios en estos huecos y en la canal de aguas, por lo que incrementan los olores fétidos en el ambiente.

Carlos Vargas, dueño de un negocio ubicado frente a uno de los pozos de agua sucia, aseguró que esta situación se ha mantenido por más de un año y esperan que por ser época electoral alguien los tome en cuenta.

“Todo aquí se llena de agua sucia y ha llegado a invadir hasta los patios de las viviendas”, acotó.

Por su parte, William García explicó que todo empeora cuando llueve, ya que los animales no se hacen esperar para salir de sus madrigueras emergiendo desde el canal contaminado y poniendo en riesgo la salud de la colectividad.

Otro de los problemas que aqueja a los vecinos de la calle Autopista del 23 de Enero es el referente al mal estado en el que se encuentra la vialidad.

Los vecinos aseguran que las calles están rotas y que todos los planes de mantenimiento vial y las toneladas de asfaltado que han sido invertidas en el municipio Girardot no han llegado hasta el barrio 23 de Enero.