fotos | ELADIO TORRES
Toda la calle se ha convertido en un foco infeccioso |
De la boca de visita brotan perennemente las aguas negras |
Carmen Rodríguez muestra lo que sale por el chorro |
Casto Bleket dice que se han cansado de pedir ayuda a Hidrocentro |
“Lo que aquí nos llega como agua, no nos sirve para nada, porque es un riesgo bañarse con ella, lavar la ropa y ni se diga de los oficios de la cocina. Para lo único que puede servir esa agua es para echarla por la poceta para que se lleve parte de la carga que ella misma trae. Aquí a los bebés tenemos que bañarlos con agua mineral, lo cual nos sale sumamente caro”, dice Carmen Rodríguez.
A la queja se suman Casto Bleket, Alfredo Quintero, Wendy Martínez, Mirla León y Juana Morales, quienes son parte de una larga lista de firmas que recogieron para presentarla a Hidrocentro.
“Hoy estuvimos esperando al ingeniero Teobaldo Ramos, jefe de ese despacho, pero nos dejó embarcados. Estamos padeciendo una situación desesperada, y no hay manera de que se nos resuelva este asunto”.
Cuentan los vecinos que la cloaca esta bloqueada, razón por la que las aguas negras manan constantemente con su carga de inmundicias y malos olores. También la tubería de aguas blancas y es allí donde se presenta el problema de la unión de las dos corrientes.
“Ya por aquí abundan las enfermedades -apunta Casto Bleket- y especialmente los niños están padeciendo de males gastrointestinales, afecciones de la piel y vías respiratorias. Aquí lo que provoca es salir corriendo, pero el problema es que uno no tiene para dónde”.
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