Con asexuados políticos o ideológicos no se va para ningún lado RENIER OTTO/ARCHIVO |
Por ejemplo Aristóbulo: después que asegura con aquella cara de Rodrigo de Triana que "el gran debate en el país es ideológico", sale y agrega que "con asexuados políticos o ideológicos no se va para ningún lado... hay que fijar una posición... Esto no es hermafrodita, no se puede ser macho y hembra al mismo tiempo, o tú eres macho o eres hembra, defínete...". Una bombita para la canalla mediática, maestro, porque no deja claro si la izquierda es la hembra y el macho la derecha (quienes, por cierto, copulan), y mucho menos quedó claro si trató de comparar a los NiNi con los homosexuales, cuyos derechos civiles cualquier persona medianamente inteligente debe reconocer y respetar. Habló de más Aristóbulo. Y en su afán de "chavitizar" el debate, desvió el eje de la discusión hacia un terreno tan resbaloso como el sexo, asunto donde puede salir peinao otra vez porque se le van a enfrentar sopotocientas mil carajitas a decirle (porque eso fue seguramente lo que entendieron) que Henrique Capriles está más bueno que comer con los dedos y que si de trata de fijar alguna posición (más bien postura) frente a él, pues a más de una le encantaría ensayar el Chinchorrozutra con el Príncipe William de por estas calles, quien, nada más y nada menos, está a punto de ser Rey. Alborozo que contrasta con el silencio que habita en algunos rincones del PSUV desde que Aristóbuló instaló su hipótesis divisionista y llevan una semana dividiendo a los militantes en machos de un lado y hembras del otro, como los nazis en los campos de concentración.
Por lo mismo es que Diosdado también ha debido ser más prudente que los diagnósticos del doctor José Marquina. Pero helo allí, desgañitándose en un mitin "autobuseado", emocionadísimo porque quizás ahora toda esa gente s.f. vote por él. Y, zuas, se resbala pero feo cuando afirma que lo que ocurrió en Cotiza se debió a que Henrique Capriles "fue a Cotiza a provocar a nuestros patrulleros", aceptando que sus patrulleros fueron los agresores, casi una hora después que desde el partido de gobierno aseguraban que lo de la caminata había sido un pre-Magnicidio, planificado desde El Pentágono.
Cómica que remató Jorge Rodríguez esa tarde pidiendo un minuto de silencio para el Presidente como si hubiese muerto, y terminándola de poner porque lo redujo a diez segundos (¿será así como calculaba el costo de las máquinas Smartmatic cuando era presidente del CNE y la empresa le invitaba a hoteles de lujo en Boca Ratón?), para continuar insultando a Capriles, afirmando que su candidatura "no prendía", justo cuando Tarek William Saab anunciaba un nuevo apagón en Anzoátegui.
Tan loco es todo lo que están haciendo, que una noticia inventada por el Chigüire Bipolar ("Chávez dijo que si Capriles gana va a gobernar desde Washington"), un gentío se la creyó y casi terminó en primera plana de El País de Madrid.
Su tragicomedia no es solo que su candidato no anda pateando casa por casa. Es que tampoco tienen a Sir Ramón Guillermo Aveledo organizándoles la rebelión...
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