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El 12F, Día de la Juventud, tres millones de venezolanos decidieron limpiar las telarañas de Miraflores ARCHIVO |
Como, por ejemplo, que el 12 de Febrero, Día de la Juventud, más de tres millones de venezolanos decidieran limpiar las telarañas de Miraflores a través de un procedimiento nuevecito: seleccionar mediante primarias a un chamo que aspira a suplantar a un señor cuyas ideas tienen como 70 años de vencidas.
Y luego el 14 de Febrero, casualmente el Día de Los Enamorados, los cuadernos de votación fueron convertidos en un tremendo polvo, después de aquella hoguera magnífica (casi escribo orgasmo), donde ardieron no sólo la identidad de los votantes, sino las ambiciones fascistas de querer resucitar la Lista Tascón, y me perdonan el verbo.
El azar también me permitió cazarle varios gazapos al ciudadano Presidente de la República mientras le hacía zapping a una de sus interminables cadenas, brincos que generalmente me llevan de un canal a otro porque ya su versión de Páez y Boves y las Batallas Gloriosas y el perro y la guacharaca, me saben a hallaquita, viejo refrán de mi santa madre, que es como decir a nada. Entonces del Canal Gourmet salto a Discovery y de Discovery a Globovisión. Y, zuas, ahí me quedo porque es justo cuando el Presidentecandidato asegura que "antes" vio a una sola persona votar 15 veces, lo que significa que: A) El Presidente, en lugar de estar solucionando problemas como el derrame petrolero en Maturín, por decir algo, se la pasa viendo Globovisión, ya que en VTV los reporteros aseguraron que ese día todo el país estaba en la playa. B) Que de ser cierta su aseveración, ha debido denunciar semejante delito con más rapidez de la que exhibió Carrasquero ordenando que le entregaran la lista de los opositores votantes. Y por último, que dada la cantaleta del alto gobierno en negar mediante triquiñuelas matemáticas que la cifra haya sido tan alta, pues ha debido el Presidente enviarle ese video a los periodistas gobierneros para que no hicieran más el ridículo tratando de convencer a los cuatro gatos que les creen de que si tres millones de personas se tardaban tres minutos en votar, las elecciones hubiesen tardado dos días. Lo que equivale a decir que en la contienda nacional estaremos votando una semana.
Tampoco es azaroso, y me perdonan la cursilería, que El Día de San Valentín haya sido la "toma de posesión" de Henrique Capriles Radonski como candidato, porque se han cansado de repetir politólogos y analistas y encuestólogos, que el país necesita enamorarse de una nueva opción, que estamos cual señora aburrida de un marido embustero y maltratador al cual, si bien lo quiere mucho, ya comenzó a cansarla porque el tipo lleva 13 años repitiendo la misma coba, prometiendo imposibles y encima se rumbea los reales en Cuba mientras en la casa se le va la luz.
Entonces, cual marido que se siente casi maleteado, busca un "testigo estrella" que impugne los resultados, afirma que la oposición "manchó las primarias" (y el meñique de muchos también) y que "la quema de los cuadernos es antidemocrática", nombrando la soga en la casa del ahorcado porque ya quisieran los del PSUV poder vivir un éxtasis tan rico como ese que experimentamos el 12F, un domingo tan luminoso como las llamas que impidieron que los cuadernos cayeran en quién sabe cuál oscura Sala Situacional.
Para mí que, como en aquella escena de Hitler viendo veinte veces el ahorcamiento de sus enemigos, el Presidente pasó varios días dándole rewind a las escenas de las colotas del 12F porque no terminaba de creer lo que veía. Entonces como la "señora" ya no le cree, ahora se cae a embustes a sí mismo.
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