Tal Cual
13-02-2017
LUISA QUINTERO /@l_andrequintero
Solo 59 organizaciones podrán renovarse, según el Poder Electoral, si lo logran. El proceso comenzará con las toldas que obtuvieron menos votos en los últimos comicios
Los partidos políticos que conforman la Mesa de la Unidad Democrática y el Gran Polo Patriótico se enfrentarán en igualdad de condiciones a un Consejo Nacional Electoral que impuso un proceso de renovación hecho a la medida para obligar a que solo pocas organizaciones logren el cometido de permanecer bajo la legalidad.
El martes 7 de enero, el CNE emitió un comunicado en el cual definió los lapsos para renovar 59 organizaciones con fines políticos que ya habían registrado su solicitud.
El proceso se realizará durante 10 fines de semana, desde el 18 de febrero hasta el 23 de abril, donde se renovarán los partidos que no participaron en los dos últimos procesos electorales o que no alcanzaron una votación equivalente a 1% de los votos emitidos entonces.
Además, el CNE dispuso que cada partido tenga dos días para la recolección de manifestaciones (14 horas, en realidad). La rectora Tania D’Amelio aseguró que el 9 de febrero, se reunirán con todas las toldas para detallar el proceso.
El CNE deberá informar en esa reunión la ubicación exacta de las 390 máquinas captahuellas dispuestas para el proceso. Además, para el 16 de febrero se espera la publicación del cronograma de recolección de manifestaciones de cada partido, pues podrán renovar seis organizaciones por cada fin de semana, según explicó D’Amelio.
Esto implica que cada partido dispondrá de solo 14 horas para lograr el 0,5% del registro electoral de 2015 en al menos 12 estados del país. Otro detalle es que los militantes deberán validar su identidad en el estado en el que se encontraban registrados para esa fecha.
Los simpatizantes tampoco podrán firmar por dos organizaciones distintas, según explicó la rectora, y solo se tomará como válido la última manifestación de voluntad.
Al respecto, el ex rector del CNE, Vicente Díaz destacó que se hace obligatoria la identificación biométrica, que calificó de discriminatoria porque buena parte de la población no puede trasladarse por condiciones económicas, de salud o dificultades de movilización.
Díaz recordó que históricamente la recolección de las firmas se llevaba a las casas de las personas. "Lo hacen los militantes de los partidos con presencia, incluso si es necesario, de testigos de otros partidos o de funcionarios electorales, y si después el CNE quiere validar esas firmas, convoca un proceso de verificación por la vía de la identificación biométrica de una muestra".
Otro aspecto destacado es la reducción del tiempo para la renovación, pues según la sentencia 878 de la Sala Constitucional del TSJ, el plazo era hasta mayo de 2017.
En dicha sentencia, la Sala consideró que el cronograma para la renovación de los partidos se había trastocado debido a la activación del referendo revocatorio planteado por la oposición en 2016, por lo que se dictó la prórroga "con miras a que la transparencia y la ética reinen en las organizaciones políticas para la seguridad jurídica y credibilidad de sus militantes y seguidores".
EN CONTRA
El rector del CNE Luis Emilio Rondón fue el primero en criticar la metodología decidida para la renovación pues, a su juicio, se limita el derecho a la participación al aprobar proceso de renovación de partidos "en condiciones de casi imposible cumplimiento" y que vulneran los derechos de asociación política. "El CNE hoy puso por encima de los derechos políticos de los venezolanos un proceso administrativo diferido en anteriores oportunidades (...) Teniendo una plataforma tecnológica mayor, el CNE decidió limitar a 390 máquinas la recolección.
Se requiere mucho más", criticó el rector, pidiendo rectificaciones.
Por su parte, el experto electoral Vicente Bello indicó que la decisión del CNE no afecta a la MUD, PSUV, Puente y Gente.
El caso de la MUD es específico, pues pesa una denuncia por fraude en el uso de identidades durante la recolección del 1% de las manifestaciones de voluntad para activar el referendo revocatorio.
Bello recordó que pese a que no existe denuncia formal interpuesta al CNE para suspender a la MUD como organización, queda pendiente el uso de la justicia como instrumento para impedir las postulaciones bajo la tarjeta de "la manito" en las próximas elecciones regionales.
Sobre la recolección, el experto electoral infiere que los partidos con mayores estructuras y movilización de la militancia podrían llegar a cumplir el objetivo. "Las cifras van desde un mínimo obligatorio de 0,5 % del registro electoral del estado respectivo, equivalente a algo más de 500 personas en los estados más pequeños, hasta 12 mil en estados más grandes".
Otro detalle, como ya se dijo, en la ubicación de los centros. De repartirse de forma equitativa, cada estado dispondría de 16 máquinas para las manifestaciones de su militancia, aunque lo previsible es que se dispongan las captahuellas de acuerdo a la densidad electoral.
"Tememos que se produzca una situación similar a la que se presentó para la verificación de las firmas para el referendo revocatorio, cuando las máquinas fueron colocadas en sitios que no eran de fácil acceso y traslado", aseveró Bello.
Además, el experto electoral consideró que la pretensión del CNE es que sea imposible para los partidos políticos renovar su nómina y, automáticamente, no poder postular candidatos a los cargos a elegir este año. "No se tiene seguridad de que pasará con las elecciones de gobernadores, que son las primeras que corresponden según el mismo CNE, pues en la nota de prensa que enviaron no dice nada al respecto".
Por su parte, Vicente Díaz enfatizó que "Bajo ningún concepto se pueden modificar periodos constitucionales, suspender elecciones establecidas en la Constitución, para renovar partidos.
Entre otras cosas porque esa renovación debió haberse hecho el año pasado, pero el CNE no la convocó y ahora lo hace en unas condiciones de imposible cumplimiento".
Díaz plantea que hasta el mismo CNE coloca en desventaja a partidos chavistas como Redes. "Esto se inscribe dentro de otro proceso adicional, que es el de negación de inscripción de organizaciones, como es el caso de Marea Socialista o Vente Venezuela, a los cuales se les ha negado sistemáticamente la posibilidad de inscribirse como partidos".
El pasado 16 de enero, ya Juan Barreto (Redes) criticaba el proceso: "La democracia no puede ser sustituida por una medida administrativa", dijo en un evento de su partido en Valencia.
PARTIDO POR PARTIDO
El orden en que las organizaciones con fines políticos deberán validar sus nóminas dependerá del último proceso electoral en el que hayan participado y de los votos obtenidos, por lo que los primeros en renovar serán aquellos partidos que no presentaron candidaturas en las dos últimas elecciones, a los cuales se les contabilizarán los votos obtenidos en las elecciones parlamentarias de 2010 (es decir, la oposición que participó en 2013 y 2015 con tarjeta única). La secuencia de atención se iniciará con el partido que haya obtenido menos votos. En este grupo estarán las organizaciones que no existían para el año 2010, las cuales serán las primeras en ser atendidas.
El segundo grupo lo integran los que sí participaron en los comicios de 2015.
Los partidos podrán hacer un informe, aunque no tendrá validez para el CNE.
Una vez culminado el proceso de manifestaciones de voluntad, será aprobado un primer informe preliminar de la jornada, luego de lo cual se abrirá el período de reparos para quienes participen en este proceso.
También se prevé un lapso de impugnaciones, antes de que sea emitido el informe final que será elevado a la consideración del CNE.
Además, la rectora Tania D’Amelio indicó que el poder electoral colocará un módulo de consulta temporal para que los electores puedan verificar si las organizaciones utilizaron su identidad de manera indebida.
Si un elector considera que sus datos fueron mal utilizados, podrán a impugnar las nóminas de manifestaciones de voluntad.
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