"Lo que queremos es que nos saquen de acá”. (Foto César Pérez)
Marianela Ágreda Armas
El Carabobeño
Bajo autosecuestro se declararon las 42 familias afectadas por el Lago procedentes del estado Carabobo y que se mantienen en calidad de refugiados en instalaciones de la Escuela para la Transformación Integral de las Comunidades de Aragua (ETICA). La medida, según lo anunciado, mantendrá de puertas cerradas la institución hasta tanto no les sean adjudicadas viviendas dignas.
Ángela Medina, vocera de los refugiados, indicó que a primeras horas de la mañana de este viernes cerraron la puerta de acceso a los trabajadores administrativos, lo que generó un altercado con quienes exigían su derecho a laborar. “Nosotros lo que queremos es que venga la ciudadana Jessica Ruiz, supuesta coordinadora política del refugio. Ya no queremos que nos traigan comida o gas, porque no lo hicieron en tres meses, lo que queremos es que nos saquen de acá”.
Los refugiados firmaron un acta mediante la cual se niegan a recibir comida insuficiente, pues aseguran que los alimentos llegaban para 80 personas cuando son 141.
A pesar de estar amparados bajo la Ley de Refugios Dignos, Medina denunció que vía telefónica la coordinadora política del lugar les indicó que los refugiados debían solventar sus necesidades básicas. Desmintió la posición oficial al asegurar que el Estado envía los recursos para la manutención de esos espacios, “para que nosotros tengamos, entre comillas, una vida digna”.
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