Súbelo al cuarto y mátalo

Tal Cual

El Cicpc tiene los nombres de dos autores del asesinato del secretario general de la institución, Ramón Maldonado. Los delincuentes dejaron muchas evidencias por lo que pronto serán capturados

Una puerta entreabierta trajo la desgracia para la familia Maldonado. Cinco sujetos, bien vestidos y armados, lograron burlar la vigilancia de la zona residencial e ingresaron a bordo de una Toyota Corolla negra último modelo, al estacionamiento de la urbanización Loira Arriba, en la calle La Montaña, de El Paraíso, la tarde del pasado domingo.

La hija del comisario Ramón Maldonado se dio cuenta justo cuando irrumpieron en la vivienda y trató de avisar a su padre, el secretario general del Cicpc, pero los antisociales fueron más astutos y la apuntaron con una pistola. De inmediato dominaron al resto de la familia que se hallaba en la parte baja de la casa, amordazándolos y amarrándolos mientras se disponían hacerle una requisa a toda la casa.

El alto funcionario fue sorprendido cuando descansaba en su habitación y sin poder hacer nada no le quedó más que dejarse someter. Los maleantes no sabían en casa de quien habían entrado. Pero al toparse con diplomas, reconocimientos, credenciales del Cicpc y dos armas de fuego, sus planes tomaron otro curso.

El grupo se dispersó por la casa logrando conseguir joyas y dinero, que no dudaron en llevarse. Cuando se disponían a huir surgió una discusión entre ellos, debido a que uno de los hampones quería matar a Maldonado, simplemente porque era policía. Otros dos sujetos se negaban hacerlo porque se trataba de alguien mayor de 50 años

Cuando la discusión llegó a su punto final, el comisario para defenderse argumentó que ya no trabajaba en las calles sino que laboraba en una oficina. Todo parecía que se iba a calmar intentaron salir de la casa, pero se regresaron. Uno de los hombres insistió en que se debía matar a Maldonado por ser policía.

El grupo convino pero alguien sugirió no hacerlo delante de la familia, por lo que subieron al funcionario a su habitación. Lo obligaron a arrodillarse y le dispararon un solo balazo en la nuca, que le atravesó el cráneo hasta salir por el maxilar. Tras la huida, los familiares lograron desatarse y pedir ayuda. Trasladaron a Ramón Maldonado a la clínica Loira donde llegó sin signos vitales

El crimen ha generado consternación en los funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalisticas, quienes se están encargando de hacer minuciosas averiguaciones para dar con la banda de asesinos que acabó con la vida de un profesional, con una impecable hoja de servicios.

Hasta ayer solo tienen a dos de los presuntos autores del crimen. Uno fue identificado como Denis Rafael Andrade y otro se conoce como el “Pelón”. Los asesinos dejaron muchas evidencias, según una fuente policial. Sus horas están contadas.