GONZALO GARCÍA ORDÓÑEZ - Tal Cual
De repente la enfermedad del candidato Chávez (CC) dejó de ser tema de interés público, pasó a ser una enfermedad por decreto, decretó que tenía cáncer, luego decretó que no. Me ubico entre quienes no creyeron y entre quienes pensaron que no era una variable electoral importante.
Un candidato debilitado en la opinión pública, en franca minoría; un candidato que perdió el valor de la palabra y pasó a depender de variables dinámicas de presión de terrorismo político. La mayoría de los electores piensan que HCh no está enfermo, que mintió; un HCh devaluado que es encuestadependiente y las usa como estrategia de contención para evitar el pánico y estampida en las filas rojas; se convirtió en un candidato dependiente de lo que el CNE y TSJ puedan hacer antes y después del 7-O; un candidato que se guinda de las cadenas para masificar su amenaza de violencia. El candidato rojo sabe que los venezolanos ya tomaron la decisión de cambio, igual ocurrió en 1998. La revolución bolivariana se quedó sin gasolina, el pueblo sigue pelando pero la clase gobernante con todos los reales del mundo.
Desde abril de 2011 el gobierno sabe que sólo el 17% de las clases D y E piensan que hay que darle mas tiempo, se le movió la silla. Ese misil electoral, ya disparado, pegará en la línea de flotación del "barco de la felicidad". Fue en Cuba donde se incubó la misión lástima, el pueblo de a pie no se la tragó tampoco algunos analistas que juntaron la información del "bajón, la enfermedad y las filtraciones del G2 a los medios". Perdida la credibilidad, desmontadas las encuestas, saturado el ambiente con las cadenas, al gobierno no le quedó otra que seguir amenazando y abusando. Muy a pesar de la inconstitucional reelección indefinida se terminó la era Chávez. El 7-O los venezolanos votarán por el cambio y el progreso.
Me ubico entre quienes piensan que un HCh derrotado entregará sin problemas, la bulla de los cocos no la compra la clase gobernante. Ellos quieren cuidar "el producto de su lealtad bolivariana".
La línea de comunicación principal que el psiquiatra quiere fijar en el electorado pasa por un conjunto finito de percepciones. Uno, basado en las encuestas, y el apoyo de los medios oficialistas, no permitir que el electorado vea a un HCh derrotado; dos, que un HCh derrotado puede tornarse violento; tres, la percepción sobre una FANB comprometida con HCh; cuatro, que HCh no reconocerá la derrota y para ello tiene al CNE y TSJ. Son percepciones para manipular al electorado.
ATENCIÓN USUARIOS DE ARAGUA SIN MIEDO
La computadora desde donde actualizamos la página web de la organización y publicamos los anuncios de los eventos está dañada desde la mañana del domingo 12 de marzo de 2017, por lo que les informamos que haremos una pausa técnica en la actualización mientras resolvemos los inconvenientes. Gracias por su atención!!!
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario