21-11-2011
Ysa Rodríguez Frisicchio
ysa.rodriguez@elaragueno.com.ve
Los residentes de la calle Colón, manifestaron que el pasado sábado tuvieron que entre ellos mismos, colocarle tierra y otros materiales, al hueco de dos metros de profundidad que recibe las aguas negras que se desbordan en el inicio de dicha calle.
De igual manera, destacaron que se está hundiendo cada vez más la calle, otro vecino comentó que su negocio tiembla, es decir que está socavándose por debajo, situación que pone en peligro a la comunidad entera.
Es importante mencionar que aun cuando los vecinos de la zona denunciaron ante Hidrocentro y los medios de comunicación regional, la Hidrológica no se ha asomado por el lugar. Es de hacer notar que los malos olores que despiden estos huecos están afectando la salud de más de uno.
La petición es la misma: “Inspeccionar las aguas servidas, las tuberías y el estado en el que se encuentran las calles de La Coromoto”; los residentes necesitan saber en qué estado se encuentra el lugar en el que han habitado por más de 40 años.
Huecos y botes de aguas negras
Al ver la mayoría de las calles de La Coromoto se puede notar que los huecos y los botes de aguas negras es lo que más resalta en el sitio. La inspección del lugar y falta de un plan de bacheo y asfaltado son algunos de los elementos que les han faltado a los entes gubernamentales.
“El problema es que estos huecos se están haciendo debido a que hace más de 50 años los vecinos de La Coromoto nos pusimos de acuerdo para hacer el embaulamiento de las aguas servidas, pero posteriormente el lugar fue creciendo y allí fueron conectando las aguas de José Félix Ribas, Residencias Coromoto y hasta Cavim, eso terminó de afectar el servicio”, relató Gladys Becerra, habitante de la calle Colón.
Por su parte Giuseppe Posado, indicó que: “Tuvimos que tapar nosotros mismos ese hueco, porque tenía veinte días que no podía sacar el carro, hasta la batería se le descargó, eso no es justo y muchas veces llamamos a Hidrocentro, pero nunca nos dio respuestas”.
Denise León, vecina de la calle Brasil, explicó que nadie ha venido a dar una respuesta o un apoyo para tapar estos huecos, “los olores que despiden éstos, hacen que los niños y todos los vecinos se enfermen, además de eso un carro o una persona se puede caer, porque en las noches por esta calle no hay luz”.
Giomar Cabrera, trabajador del lugar, informó que el hueco que aún permanece abierto en la calle Brasil, se está socavando con dirección a la esquila, lugar en donde está el negocio de Cabrera, “esto es un problema grave porque ya no sabemos a quién acudir o si nos darán respuestas”.
Finalmente, Adalberto Román, dijo, “los huecos están por todos lados, en la avenida 106 de la localidad maracayera está un hueco que abarca dos casas, el mismo ha sido tapado con escombros por los mismos vecinos, evitando que la situación se agrave”.
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