FRANK LÓPEZ BALLESTEROS | EL UNIVERSAL
viernes 28 de octubre de 2011 12:00 AM
"El silencio otorga, y en esto el Derecho Internacional Público es claro, pues el Gobierno venezolano, al no pronunciarse sobre este proyecto hidroeléctrico de Guyana, así como otros más, envía un mensaje de condescendencia... esperemos no se esté renunciando a este territorio", declaró Garavini.
Los comentarios del Embajador se producen luego de que la Casa Amarilla declinó emitir comentarios públicamente sobre el plan de Guyana de construir una central hidroeléctrica en la zona en reclamación.
"Vaya a la página del Ministerio de Relaciones Exteriores, si no hay algo allí sobre ese tema, entonces no hay comentarios", respondió una funcionaria al ser consultada.
Este jueves El Universal publicó un reportaje donde reveló que el Gobierno de Guyana "desarrolla la construcción de una central hidroeléctrica en el área centro-oeste del territorio Esequibo donde confluyen los ríos Amaila y Kuribrong con el objetivo de crear un suministro confiable de energía eléctrica".
El proyecto, que será ejecutado por un consorcio mixto entre guyaneses y estadounidenses, incluyendo a una empresa de China, data de 2002, y fue publicado por la Agencia de Protección Ambiental de Guyana en julio de 2011.
Esta noticia trasciende tras las intenciones de Guyana de extender su plataforma continental en 150 millas (241 kilómetros), según comunicación enviado a la ONU en septiembre 2011. Esto significaría una extensión de su espacio marítimo, en una zona rica en yacimientos de petróleo y gas donde transnacionales de EEUU y Canadá han invertido.
El Acuerdo de Ginebra firmado en 1966 es el instrumento que fija la pauta para buscar solución a la controversia por el territorio en reclamación.
Hasta 2004 el Gobierno venezolano se había manifestado en contra de cualquier construcción en el Esequibo, obligando al vecino, en algunos casos, a cancelar los proyectos.
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