Hace ocho años el parque tecnológico no se actualiza | Foto Archivo El Nacional
Un apagón en las telecomunicaciones ocurre por fases. La sequía de dólares obligó a las operadoras de telefonía móvil a suspender llamadas internacionales y servicio de roaming, por la imposibilidad de cumplir con los contratos con proveedores extranjeros. La estatal Cantv, aunque no ha hecho anuncios oficiales, también ha ido apagando algunos canales de la parrilla de la televisión satelital y la comunicación con el extranjero experimenta fallas y restricciones por falta de pagos y mantenimiento. Venezuela se desconecta y se queda atrás en un área prioritaria para el desarrollo
RELACIONADAS
Sin “vidas” en el Internet más lento
El zapping se acorta por falta de dólares
CARMEN VICTORIA INOJOSA / SIETE DÍAS - EL NACIONAL
CINOJOSA@EL-NACIONAL.COM
24 DE ABRIL 2016 - 12:01 AM
Mientras se recupera la conexión, el dinosaurio de Google sigue allí, en las computadoras de los venezolanos. La barra espaciadora del teclado invita a saltar la mayor cantidad de cactus en tiempo récord y, como es recurrente quedarse sin Internet, en este “deporte” offline el país puede llevarse medallas. Llamar por teléfono, pagar con tarjeta de débito, mirar un canal de televisión internacional en Venezuela también implica otras destrezas: moverse de un sitio a otro para que la comunicación no se entrecorte en caso de que el discado haya superado el túnel de eco en que se quedan muchas llamadas o que el embotellamiento de datos en las insuficientes redes logren atravesar los constantes “fuera de servicio”, “sin línea”, “sin señal”.
La desconexión se hace cada vez más frecuente en Venezuela, cuyo parque tecnológico no ha tenido mayor renovación desde hace 8 años, cuando se nacionalizó la Cantv. El país fue pionero durante la década de los años noventa en la incorporación de planes prepagados y pospagos para móviles. En el año 2000 dio los primeros pasos en el uso de banda ancha por fibra óptica y lideró en América Latina el consumo de smartphones y datos para celulares. En la actualidad Venezuela está prácticamente fuera de servicio, desconectada del mundo, sin cobertura. Las divisas que faltan en casi todos los sectores de la economía, luego de 13 años de controles y una sequía de ingresos petroleros, van abriendo la zanja del aislamiento en las telecomunicaciones.
El coordinador de la carrera de Ingeniería en Telecomunicaciones de la Universidad Simón Bolívar, Renny Brada, señala que cuando el financiamiento es insuficiente la plataforma deja de evolucionar. Es lo que ha pasado en los últimos años, y la lentitud del Internet, el reciente anuncio de la desconexión de servicios de roaming y llamadas internacionales y de canales por operadoras son síntomas del atraso. “Mientras, se va incrementado el tráfico y la demanda del servicio, las velocidades de ancho de banda quedan estancadas Hay equipos que se pueden arreglar en el país, pero muchos son avanzados y no se cuenta con la capacidad técnica. Cuando no hay dólares se produce un deterioro en las labores de mantenimiento de toda la industria”.
La desmejora de los servicios es evidente. Y Rómulo Colmenares, presidente de la Cámara de Empresas de Telecomunicaciones (Canaemte), argumenta que es producto de la baja actualización de los equipos y tecnologías. Asegura que eso no permite ampliar ni actualizar las redes fijas y móviles: “Los proyectos de acceso fijo de banda ancha están atrasados desde hace varios años y en el país se continúa utilizando cables de cobres”. El uso de ese material limita las posibilidades de obtener más velocidades de navegación.
Uruguay, Argentina y Chile han mejorado sus indicadores de conectividad con fibra óptica. En Venezuela se necesita ampliar la red existente, desplegar más radio bases y ampliar el espectro radioeléctrico. “Si el Estado pone un cuello de botella en la asignación de divisas para inversión o asignación de espectro, las operadoras no podrán acometer las obras necesarias en infraestructura y será una consecuencia ineludible el deterioro del servicio”, agrega Colmenares.
Conatel dispone del Fondo de Servicio Universal, destinado a subsidiar los costos de infraestructura del sector. Las operadoras Movilnet, Digitel y Movistar aportan el equivalente a 1% de sus ingresos brutos. En 2015 el acumulado de recaudación fue de 1.303 millones de bolívares, un aumento de 73,06% con respecto a 2014.
MAS INFO AQUÍ
Mientras se recupera la conexión, el dinosaurio de Google sigue allí, en las computadoras de los venezolanos. La barra espaciadora del teclado invita a saltar la mayor cantidad de cactus en tiempo récord y, como es recurrente quedarse sin Internet, en este “deporte” offline el país puede llevarse medallas. Llamar por teléfono, pagar con tarjeta de débito, mirar un canal de televisión internacional en Venezuela también implica otras destrezas: moverse de un sitio a otro para que la comunicación no se entrecorte en caso de que el discado haya superado el túnel de eco en que se quedan muchas llamadas o que el embotellamiento de datos en las insuficientes redes logren atravesar los constantes “fuera de servicio”, “sin línea”, “sin señal”.
La desconexión se hace cada vez más frecuente en Venezuela, cuyo parque tecnológico no ha tenido mayor renovación desde hace 8 años, cuando se nacionalizó la Cantv. El país fue pionero durante la década de los años noventa en la incorporación de planes prepagados y pospagos para móviles. En el año 2000 dio los primeros pasos en el uso de banda ancha por fibra óptica y lideró en América Latina el consumo de smartphones y datos para celulares. En la actualidad Venezuela está prácticamente fuera de servicio, desconectada del mundo, sin cobertura. Las divisas que faltan en casi todos los sectores de la economía, luego de 13 años de controles y una sequía de ingresos petroleros, van abriendo la zanja del aislamiento en las telecomunicaciones.
El coordinador de la carrera de Ingeniería en Telecomunicaciones de la Universidad Simón Bolívar, Renny Brada, señala que cuando el financiamiento es insuficiente la plataforma deja de evolucionar. Es lo que ha pasado en los últimos años, y la lentitud del Internet, el reciente anuncio de la desconexión de servicios de roaming y llamadas internacionales y de canales por operadoras son síntomas del atraso. “Mientras, se va incrementado el tráfico y la demanda del servicio, las velocidades de ancho de banda quedan estancadas Hay equipos que se pueden arreglar en el país, pero muchos son avanzados y no se cuenta con la capacidad técnica. Cuando no hay dólares se produce un deterioro en las labores de mantenimiento de toda la industria”.
La desmejora de los servicios es evidente. Y Rómulo Colmenares, presidente de la Cámara de Empresas de Telecomunicaciones (Canaemte), argumenta que es producto de la baja actualización de los equipos y tecnologías. Asegura que eso no permite ampliar ni actualizar las redes fijas y móviles: “Los proyectos de acceso fijo de banda ancha están atrasados desde hace varios años y en el país se continúa utilizando cables de cobres”. El uso de ese material limita las posibilidades de obtener más velocidades de navegación.
Uruguay, Argentina y Chile han mejorado sus indicadores de conectividad con fibra óptica. En Venezuela se necesita ampliar la red existente, desplegar más radio bases y ampliar el espectro radioeléctrico. “Si el Estado pone un cuello de botella en la asignación de divisas para inversión o asignación de espectro, las operadoras no podrán acometer las obras necesarias en infraestructura y será una consecuencia ineludible el deterioro del servicio”, agrega Colmenares.
Conatel dispone del Fondo de Servicio Universal, destinado a subsidiar los costos de infraestructura del sector. Las operadoras Movilnet, Digitel y Movistar aportan el equivalente a 1% de sus ingresos brutos. En 2015 el acumulado de recaudación fue de 1.303 millones de bolívares, un aumento de 73,06% con respecto a 2014.
MAS INFO AQUÍ
No hay comentarios:
Publicar un comentario