El Carabobeño
Luis Alejandro Borrero | lborrero@el-carabobeno.com
El muro de contención de mil 150 metros de longitud que protege a las comunidades de La Punta y Mata Redonda está cediendo. La cresta que eleva su cota a 414 metros sobre el nivel del mar, desapareció casi por completo. El golpe de las olas de 344 kilómetros de agua, de la cuenca endorreica más grande del país, hizo que varios tramos quedaran lisos.
La superficie del muro es fangosa. Tan endeble que con solo pisar las botas quedan hundidas en el terreno. Muy lejos de lo que antes de las lluvias parecía una estructura sólida. El oleaje trajo consigo botellas de plástico y restos de algas y en partes del muro quedaron por encima.
Durante un soleado domingo el 28 de abril, el gobernador de Aragua, Tareck El Aissami anunció que para julio se construiría un contramuro, un metro por encima de la primera estructura. Nada se concretó, incluso los trabajos que se adelantaban quedaron diluidos por el agua.
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