DOCENTES Y SALARIO MÍNIMO

LEÓN ARISMENDI - Tal Cual

A partir del 1 de septiembre del año en curso el salario mínimo se colocará en la cantidad de DOS MIL CUARENTA Y SIETE BOLIVARES CON 52 CENTIMOS (Bs 2.047,52). Por debajo del aludido monto carecerá de validez cualquier pacto salarial, salvo que se trate de labores ejecutadas por horas o en jornadas inferiores a la ordinaria.

En una de las tantas aproximaciones a la utilidad del salario mínimo, este se asocia a la remuneración que devenga el trabajador con las menores calificaciones y destrezas en el mercado de trabajo; esto es, no se necesita saber ni la o por lo redondo para tener derecho a percibirlo. De modo que no es para salir a tirar cohetes constatar que en una sociedad muchos trabajadores devengan salario mínimo, pues ello puede ser un indicador de que la capacitación no tiene ningún peso en las remuneraciones.

Pero más preocupante es la mencionada variable cuando incursionamos en los sueldos de quienes se dedican a la educación, proceso al que se le adjudica rol prioritario en la construcción de una sociedad equilibrada y justa, que garantice igualdad de oportunidades y de trato para todos.

Según cifras de la Federación Venezolana de Maestros, a partir de julio de este año el sueldo de un Docente I, de educación Básica, Media y Diversificada, está fijado en la cantidad de DOS MIL OCHOCIENTOS ONCE BOLIVARES CON 39 CENTIMOS (Bs 2.811,39), que equivale a 1.37 salarios mínimos; es decir, luego de obtener el título correspondiente, la diferencia salarial de ese educador con alguien que no sepa leer ni escribir es de Bs 764,38. En el caso de los profesores universitarios el drama es mayor, por tratarse de quienes se ocupan de la educación superior. La tabla de sueldos colgada en la página electrónica de la Oficina de Planificación del Sector Universitario indica que el sueldo de un Profesor Instructor, (requiere unos 18 años de estudio, incluido el cuarto nivel) con dedicación a Tiempo Completo (no puede tener otra ocupación sin obtener permiso de las autoridades universitarias) alcanza la suma de DOS MIL SEISCIENTOS SESENTA Y SIETE BOLIVARES (Bs 2.667,00), que es igual a 1.30 salarios mínimos. Como puede observarse, el sueldo de un docente de Educación Media supera al del universitario de nuestro ejemplo en Bs 144,39 y este, a su vez devenga Bs 619,48 más que un trabajador sin ninguna instrucción.

Las precitadas cifras contradicen el texto constitucional, según el cual el Estado debe garantizar a quienes se dedican a la carrera docente "un régimen de trabajo y nivel de vida acorde con su elevada misión". En el caso universitario parece obvio que estamos en presencia de una deliberada retaliación por motivos ideológicos. Se castiga a las universidades (en particular a las autónomas) y se les declara enemigas de la revolución por procurar ceñirse a su papel institucional de servirle a la Nación y no al partido de gobierno. He aquí razones adicionales para redoblar los esfuerzos en función de derrotar el 7 de octubre al autor de este desastre.