"Nadie puede hablar de desestabilización cuando el problema de los contratados tiene 20 años" "Se requiere voluntad de gremios, gobierno y universidad para solucionar situación de los contratados"
El rector de la ULA asegura que existe la mayor voluntad para contratar a los trabajadores eventuales pero ata esta disposición a los recursos que otorgue el Gobierno CORTESÍA NORA SÁNCHEZ
NORA SÁNCHEZ | ESPECIAL PARA EL UNIVERSAL
domingo 3 de junio de 2012 12:00 AM
Mérida.- Con unas cuantas leyes en sus manos, incluyendo la Constitución Nacional, y dos tomos donde se reflejan las innumerables solicitudes de recursos que ha hecho ante el Ministerio del Poder Popular para la Educación Universitaria (Mppeu) desde que es rector de la Universidad de Los Andes (ULA), Mario Bonucci, aseguró que no despidió a las dos mil 653 obreros y trabajadores eventuales antes de la aprobación de la Ley Orgánica del Trabajo, los Trabajadores y las Trabajadoras (Lottt).
-¿Qué pasó con esos trabajadores?
-Yo no despedí a nadie, simplemente haciendo uso de la ley antes de que se cumplieran los 30 días, suspendí los contratos. No se volvieron a contratar para no caer en una ilegalidad, pero de inmediato solicito los recursos a la ministra (Yadira Córdoba), pero esas cosas no dicen, en el momento que se sabe que viene una nueva ley, el 2 de mayo yo le envío una comunicación a la ministra pidiéndole los recursos y anexándole la última comunicación donde estaba pidiendo para estos trabajadores eventuales.
-¿Qué le dice el Ministerio de Educación Universitaria?
-Que aplique la Ley del Trabajo, que los incorpore, pero si el ministerio ya le ofreció a los gremios que van a entrar, bueno envíenme la carta con la disponibilidad y por eso lo digo clarito en una comunicación "(... ) de autorización expresa y determinada que contenga de manera inequívoca la posibilidad de su ingreso y la garantía de los recursos presupuestarios y financieros correspondientes".
-El sector oficialista señala que esta situación forma parte de una agenda de desestabilización que está emprendiendo la Universidad.
-Nadie puede hablar de agenda de desestabilización cuando esto es un problema que tiene 20 años, desde que Perucho (Pedro Rincón Gutiérrez) era rector, pero desde 2008 estoy pidiendo los recursos. Nadie puede hablar de eso, lo que si hay que hablar es que se aprobó una ley sin previsión. Una ley que aplaudimos pero, reitero, no se tomó la previsión.
-¿Puede incorporar a los cargos fijos a esos trabajadores con la situación presupuestaria y financiera actual de la ULA?
-No, si el Ministerio no me da los recursos. No puede ser que para que yo cumpla con la nueva ley tenga que infringir otras leyes como la Constitución Nacional (artículo 314), la Ley de Universidades (artículo 36, numeral 8), la Ley Contra la Corrupción (artículo 59), la Ley Orgánica de Administración Financiera del Sector Público (artículo 49), la Ley Orgánica de la Contraloría General de la República y del Sistema Nacional del Control Fiscal (artículo 91). Se me pide que aplique la Ley del Trabajo, que no la estoy violentando, pero no se me dan los recursos.
-¿Quiere el gobierno que usted incurra en esos delitos?
-En la reunión que tuvimos con Tibisay Hung (adjunta a la dirección de la Opsu) esa fue la sugerencia. Se me sugirió violar la ley con el argumento de que tenía que tener voluntad política y yo dije: voluntad política yo la tengo, si no, no estaría aquí (en el ministerio). No estaría haciendo todo lo que estoy haciendo.
-¿A qué voluntad política se refiere el gobierno?
-Incurrir en ilícitos me imagino, porque ¿cómo los voy a incorporar si no tengo el dinero? Pero, quiero que quede claro, esta es una situación heredada y desde 2008 estoy buscando los recursos.
-¿Entonces no va a incorporar a esos trabajadores?
-No, hasta que el Ministerio me lo autorice y me de la disponibilidad presupuestaria correspondiente. Sin la disponibilidad estaría yo cometiendo un delito.
-Con esta situación laboral, ¿cómo está funcionando la universidad?
-En estos momentos está funcionando con dificultades: la paralización de los comedores; en muchos sitios la limpieza puede tener problemas; el transporte. 50% de los choferes son eventuales, eso puede afectar las prácticas de campo (... ), hay muchas cosas que se empiezan a suspender aún cuando no se siente que la Universidad está cerrando. Obviamente que eso tiene un límite. ¿Hasta cuándo? No lo sé, pero el esfuerzo que estamos haciendo todos es mantener la Universidad abierta.
-Si no recibe respuesta en los próximos días, ¿qué futuro le avizora a la Universidad de Los Andes?
-Bien difícil. Yo creo que habría que plantearse incluso el período vacacional. Habría que hablar con la gente que trabaja fija, porque esta Universidad en agosto tenemos que ver como la cuidamos. Pero yo no soy tan negativo, porque hay otras gestiones que se están haciendo, por ejemplo, en la Asamblea Nacional. Además, la misma ministra (Yadira Córdoba) está creando una comisión interministerial.
-Entonces ¿hay disposición del gobierno para resolver el problema?
-Es que la ministra siempre ha estado en disposición, lo que yo creo y siempre he dicho, es que no está previsto sacar dinero de la noche a la mañana. Va a ser imposible. Tenemos que llegar a acuerdos.
-¿Cómo cuáles?
-Acuerdos como la incorporación de un número mínimo de personas necesarias para el funcionamiento, pero que eso no signifique que desconocemos al resto, no. Tienen que entrar todos, ¿en cuánto tiempo?, no lo sabemos, pero ahorita tenemos que contar con un mínimo de personas para funcionar, ese es el primer elemento. El segundo elemento es que esas personas que se incorporen entiendan que van a cobrar su salario dentro de unos cuantos meses, porque habrá que solicitar los créditos adicionales correspondientes y el tercer elemento, aquí tiene que haber una gran unión, un gran diálogo sobre cómo incorporar, cómo resolver y cómo regularizar la situación de toda la gente que tenemos en esta circunstancia y eso requiere de la unidad de gremios, autoridades y gobierno.
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