fotos | ENRIQUE SILVA
Vecinos limpiando las calles en las que el lodo hizo de las suyas |
Cuadrillas de la alcaldía sacaron escombros y lodo |
Entre ellos la señora Reina Hernández, vecina de la calle El Mamón, quien aún angustiada por el “río de agua” que brotó del zanjón y entró a su vivienda, aseveró “esto no había pasado en los más de 50 años que tengo habitando en esta zona. Mi casa siempre ha estado ubicada a orillas de la canal y, en ningún día de lluvia, ésta se había desbordado hasta mojar mis enseres; pasa que el burgomaestre aprobó un proyecto de embaulamiento de la misma y, lejos de enviar a un experto para la supervisión de la obra, dejó a los miembros del Consejo Comunal a la deriva”.
Evidentemente, continuó diciendo la entrevistada, quienes pusieron en marcha el proyecto “no son profesionales en la materia y sin querer complicaron el panorama en un día de leves pero constantes lluvias (...) las cabillas atravesadas obstruyeron el paso y desataron el desastre que causó zozobra en mi hogar”. Por lo que el también habitante de la vivienda afectada, Efraín López, exhortó a los responsables a culminar las labores antes que la temporada lluviosa arranque con todas las de la ley.
Dentro de ese contexto, no hay que dejar de lado la situación de Maritza Ríos y Sandra Rivero, vecinas de el conocido “Refugio” de la parte alta de la calle Mérida en Los Jabillos, quienes dijeron “momentos de terror vivimos cada vez que llueve; el cerro que se ubica justo en la parte posterior de nuestras viviendas amenaza con caer sobre nosotros”.
“Los deslizamientos de tierra son constantes, el barro y agua anega nuestros humildes hogares y la ayuda que tanto esperamos de las autoridades locales, regionales y nacionales brilla por su ausencia (...) estamos conscientes de que nos instalamos en una estructura que no era nuestra, pero debemos dejar claro que estaba abandonada y la necesidad nos obligó a hacerlos. El problema es que el riesgo nos persigue y no gozamos de los recursos necesarios para mudarnos por cuenta propia”.
Caso similar al del vecino de la calle Lara, Rubén Gómez, quien aún cuando dispone de un techo propio y digno, se está viendo afectado por la obstrucción de una canal que al desbordarse inunda su vivienda y la falta de un muro a orillas de la carretera principal que se viene socavando progresivamente.
Oportuna remoción de lodo y escombros
Pese a lo antes descrito, otras familias de esta y demás comunidades del municipio Santos Michelena que resultaron parcialmente afectadas por la media hora de incesantes lluvias, aplaudieron la oportuna respuesta del burgomaestre José Gregorio Díaz, quien con un gran equipo humano y técnico dio paso inmediato a las labores de remoción de escombros y lodo.
“Afortunadamente el alcalde se hizo presente con su equipo de trabajo y nos ayudó mucho con maquinarias pesadas que sacaron 22 camiones de lodo de diferentes sectores. Nosotros, por nuestra parte, contratamos un camión adicional para despejar las vías y estuvimos pendientes de alimentar a los obreros y darles café caliente. Las cuadrillas estuvieron en las zonas afectadas casi hasta las diez de la noche y estamos ligando que no llueva hasta que la torrentera esté totalmente espejada” dijo Ana Meléndez, integrantes del Consejo Comunal de El Mamón.
Se supo que Díaz Marín comandó un equipo que se encargó de supervisar todas las comunidades afectadas, entre los que destacó: el personal de Protección Civil y Administración de Desastres a cargo de Carmen Crespo, funcionarios del Cuerpo de Bomberos y Elecentro, además del equipo de la dirección de transporte que dirige el señor Nelson Urbina, quien dispuso de toda la maquinaria pesada y camiones.
“Gracias al plan preventivo de limpieza en las cunetas, torrenteras y quebradas, no se registraron mayores daños. Sin embargo, por causas naturales bajó gran cantidad de sedimento que obstruyó en gran medida alguna de éstas, así como restos de basura que aún algunas personas arrojan a los cauces (...) un promedio de 35 camiones llenos de lodo y escombros retiramos de las comunidades más afectadas como fueron: Los Jabillos y la Cañada de Las Veras, pero allí estuvimos dándole respuesta a la gente”, señaló la Primera Autoridad Municipal”.
Ello fue especificado por la máxima autoridad local en compañía de Carmen Crespo, directora de PC-Santos Michelena, quien finalizó informando “siete viviendas resultaron afectadas por el desbordamiento de las torrenteras y el desprendimiento de un árbol a la altura del peaje de Guayas, contingencia que fueron oportunamente atendidas”.
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