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martes, 8 de mayo de 2012

Ribas: No se consiguió harina de maíz este fin de semana en La Victoria

SCARLET BARBERA PINTO | el siglo
fotos | ENRIQUE SILVA

Comprando alimentos de la cesta básica en base a los precios
Ligia Quintero
Kelvis Giménez
Elizabeth Rodríguez
Juan Carlos Fernández, gerente de una de las sucursales de una cadena victoriana de supermercados
A escasos días de haber entrado en vigencia el incremento del salario mínimo decretado por el Gobierno Nacional, los ribenses no dudan que en los próximos días empiece a aumentar el precio de algunos de los productos de primera necesidad. Coincidieron en manifestar que “si bien una buena cantidad de estos se encuentra regulado, los del sector productivo y comerciantes en general no dudarán en subir el costo de los que se encuentren liberados”.

“No es ninguna novedad, por el contrario, es la misma historia de todos los años; por un lado aumentan el sueldo mínimo y por el otro el costo de los alimentos, los servicios y hasta las consultas médicas (...) lo único que nos puede salvar un poco es que los detergentes, pañales, el papel higiénico, compotas y similares también entraron en la regulación, no obstante, no faltan los especuladores, siendo preciso recordar que los únicos que cumplen lo estipulado en Gaceta Oficial son los supermercados y mercados y, a veces, la escasez nos obliga a ir de abasto en abasto”.

Ello fue expresado por las entrevistadas Elizabeth Rodríguez y Belén Álvarez en medio de las compras que, la mañana de ayer, realizaban en una de las sucursales victoriana de una reconocida cadena de supermercado, en cuyos no se consiguió harina de maíz este fin de semana; “cuándo no es una cosa es la otra, si hay leche no hay harina y viceversa. Ir de compras es un suplicio y lo peor es que esta situación parece no tener remedio”.

Conscientes del panorama antes expuesto, los también entrevistados Ligia Quintero y Kelvis Giménez, tienen sin embargo la esperanza de que el problema merme un poco. Señalaron que “aún cuando productos como el aceite se desaparecen de vez en cuando, debemos admitir que los alimentos de la cesta básica se consiguen ya con más regularidad. Esperamos y confiamos en que la reciente regulación de productos de higiene, limpieza y otros tantos impida el incremento que suele acompañar el aumento del salario mínimo”.

Tras lo antes descrito es de citar lo que al respecto declaró el gerente de un supermercado del centro de la ciudad victoriana, Juan Carlos Fernández “efectivamente, la reciente regulación de un considerable número de productos, además impedirá de una u otra manera el descomunal incremento de los precios de los alimentos que solía acompañar al nuevo salario, siendo preciso destacar que, a la fecha, ninguno de nuestros proveedores no ha asomado la posibilidad de un incremento; la lista de precios se mantiene (...) puede que aumenten productos como los pasabocas, pero, lo cierto es que por ahora nada se sabe” finalizó.

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