el siglo | La Victoria
fotos | ENRIQUE SILVA
Félix Hernández, oficial de la PA |
Keila Solórzano, portera del HJMB |
Adriana Urbina, enfermera |
María Barrios, enfermera |
Juan Pineda, departamento de Saneamiento del HJMB |
Blanca Torres, vendedora en Panadería |
Tal fue el caso de las licenciadas en enfermería, Adriana Urbina y María Barrios, quienes desde primeras horas del día de ayer prestaban sus servicios en el área de emergencia del Hospital José María Benítez, expresando “la salud es prioridad y, aunque nuestra familia a veces no lo entienda -tras su deseo de compartir una fecha especial con nosotrasel deber nos llama y la pasión por nuestra profesión nos hace olvidar que podríamos estar en casa; ayudar a la comunidad es nuestro deber y saber que lo estamos haciendo bien nuestro mejor obsequio un día como hoy”.
Caso similar al del joven Félix Hernández, oficial de la Policía de Aragua destacado en la estación Las Luisas-Revenga y quien, desde el pasado Domingo cumplía con una ardua guardia en la Brigada de Seguridad Hospitalaria que funciona en las adyacencias del nosocomio victoriano; “nuestra misión no tiene descanso y, aunque me gustaría disfrutar este día al lado de mi pequeña hija, debo cumplir con mi deber y prestar a la sociedad un servicio tan vital como el de la seguridad”.
No hay que dejar de lado a Keila Solórzano, portera del importante centro de salud del eje este de Aragua, quien destacó “mi trabajo implica no gozar de Días Feriados, tampoco de asuetos decembrinos o religiosos, pero, me gusta lo que hago y lo más importante es que un verdadero trabajador es quien de manera responsable cumple con sus obligaciones laborales”.
Dentro de ese contexto, es de mencionar a los también victorianos Blanca Torres y Juan Pineda, vendedora en una panadería y trabajador del Departamento de Saneamiento del HJMB, respectivamente, quienes aplaudieron lo antes expuesto por los -al igual que ellos- agasajados y finalizaron diciendo “la necesidad es también una palabra clave en nuestra labor; la situación económica está tan dura que, actualmente, pocos se pueden dar el lujo de faltar a su puesto de trabajo y, por ende, poner en riesgo su cargo. De manera que, más allá de la vocación debemos ser responsables y esforzarnos por, dignamente, conseguir el pan de cada día”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario