La presión hizo efecto

Tal Cual Digital / Globovisión


Liberados implicados en caso de la fiesta Rave por Globovision

Los once detenidos en el caso de la fiesta rave fueron liberados este miércoles, luego de que sus familiares sostuvieran una huelga de hambre por 28 días

Los once detenidos por el caso de la supuesta “fiesta rave” en Higuerote fueron liberados ayer, luego de que sus familiares mantuvieran una huelga de hambre desde hace 29 días en la sede de la Defensoría del Pueblo, en la avenida Urdaneta, de Caracas.

La jueza Marian Altuve dictó medida de libertad condicional, con régimen de presentación cada quince días ante el tribunal y prohibición de salida del área metropolitana de Caracas para las once personas (nueve hombres y dos mujeres) que llevaban 14 meses detenidos.

Ante la falta de respuestas por parte del Estado, sus familiares habían advertido ayer en la mañana, que si no se dictaba libertad condicional, iniciarían una huelga de sed.

“La única funcionaria que se abocó al caso y leyó el expediente fue la defensora del pueblo, Gabriela Ramírez. Antes habíamos ido a todas partes y nos cerraban las puertas. En la Fiscalía nos dijeron que si nos íbamos a huelga de hambre, me quitaban a mi nieto”, denuncia Julio García Estredes, padre de Karin García, una de las implicadas.

García Estredes considera que la medida se tomó gracias a las presiones que ejercieron con la huelga de hambre.

“Desde un principio, la jueza sabía que estos muchachos eran inocentes. Menos mal que ahora sí tuvo la valentía de decidir que los juzguen en libertad. Los otros dos jueces que tuvieron este caso en sus manos no lo hicieron. Hubo una que dijo que ya estaban por jubilarla y que, si los declaraba inocentes, su cabeza iba a rodar”, añade.

Los hechos

El 23 de mayo de 2010 se realizó el allanamiento de una quinta en Higuerote, donde se realizaba una supuesta fiesta rave. Los familiares niegan esta versión y aseguran que la Guardia Nacional irrumpió en el lugar sin ninguna orden judicial y se llevó detenido al grupo. También relatan que en la fiesta estaban presentes más de 100 personas y que no había alcohol ni drogas.

“Le pido a los fiscales que tengan un poquito más de seriedad cuando vayan a culpar a personas. Así como estaba mi hija, hay muchísimas personas privadas de libertad siendo inocentes. Entran siendo inocentes y salen siendo delincuentes. Esas son cosas que a uno lo decepcionan como venezolano. Uno trata de creer en la justicia venezolana pero viviendo esto, me pregunto en manos de quién estamos”, expresa García Estredes.