Ribas: ¡En Tierra Blanca no pegan una! Mejoras habitacionales se convirtieron en destrozos de viviendas

SCARLET BARBERA PINTO
el siglo - La Victoria
fotos | ENRIQUE SILVA

Las caminerías brillan por su ausencia

Transitar por las calles de tierra es prácticamente imposible en época de lluvia

SOS a las autoridades locales, regionales y nacionales

Deficiente alumbrado público

Lejos de ser beneficiados con uno de los tantos programas habitacionales que impulsa el Gobierno Nacional, los vecinos del sector Tierra Blanca del municipio José Félix Ribas fueron “perjudicados” con la famosa sustitución de Ranchos por Casa, y es que, lejos de cumplirse “solo se realizaron trabajos de reparación que, irónicamente, dejaron destrozadas un considerable número de viviendas”.

Así lo dio a conocer una de las principales afectadas, Belkis Mejías, al tiempo que mostraba las fotos de la que era su casa, “de paredes bien frisadas y piso pulido”, a diferencia de la de ahora “de paredes con todo tipo de friso, grietas y piso de tierra (...) no hay duda, fue peor el remedio que la enfermedad. Lo más triste es que los responsables de un problema, que tiene ya más de dos años, se hayan lavado las manos”.

Al explicar que su “calvario” comenzó con la instalación de un “buen” sistema eléctrico en su humilde morada, la entrevistada continuó diciendo, “las personas a cargo de las labores que mejorarían la calidad de vida de mi familia, no hicieron más que destrozar todo lo que encontraron a su paso, siendo preciso destacar que los vecinos no corrieron con mejor suerte, pues los techos de sus viviendas fueron desmontandos para instalar unos nuevos que, a la fecha, brillan por su ausencia”.

Dicho esto y tras destacar que “como estos casos, otros tantos”, Mejías lamentó el hecho de que las autoridades municipales, regionales y nacionales hagan caso omiso al llamado de una comunidad que solo pide le respondan por los daños causados, dejando claro que “además de gozar de los recursos necesarios para ello, les compete (...) con pruebas en la mano, hemos ido hasta Miraflores y nos han ignorado, mientras tanto, mi hijo padece y padece enfermedades respiratorias, pues ¡ni siquiera! me han querido echar una mano con los materiales para la construcción que necesito para echar el nuevo piso”.

¡No hay asfalto!

Por si fuera poco, agregó la también vecina de la zona María Teresa Mejías, “tenemos que lidiar con la falta de asfaltado y caminerías. Las calles son de tierra en su totalidad, convirtiéndose en un impenetrable pantano en épocas de lluvia, como las que se avecinan y, aunque la comunidad se ha organizado con la debida conformación de un consejo comunal, pues todo indica que a éste no se le ha aprobado ningún proyecto de mejora de la vialidad”.

Una carencia a la cual se suma el deficiente alumbrado público, según señaló el ciudadano Martín Sosa, fue uno de los que se quedó a la espera de la sustitución de su rancho de tabla por una casa de bloque y no dudó en exhortar a la máxima autoridad de La Victoria, Juan Carlos Sánchez, a tomar en cuenta al Poder Popular de una comunidad que pertenece a su jurisdicción, aun cuando está ubicada en la vía que conduce a la población de San Mateo.