Interponen recurso de amparo contra medida que obliga a licorerías a mudarse

El Aragüeño
18-09-2011
Ysa Rodríguez Frisicchio
ysa.rodriguez@elaragueno.com.ve

Tras el anuncio de parte del Servicio Autónomo de Tributación Municipal (Satrim) sobre la aplicación de medida de cierre a licorerías que incumplan las leyes, se llevó a cabo una encuesta a vendedores del ramo a fin de conocer su punto de vista sobre la situación.

Los licoreros encuestados manifestaron que deben revisar cuáles son los que tienen sus documentos renovados y están al día con sus impuestos, otros aseguran que introdujeron un recurso de amparo, y desde ya se están organizando para evitar la mudanza obligatoria.

Antonio Baeta, quien trabaja en una licorería ubicada en la parte norte de la ciudad de Maracay, aseguró que “yo introduje un recurso de amparo, porque yo tengo mi metro y hay más de 200 entre la escuela y mi negocio, además yo ya lo medí, que vengan y corroboren”.

Asimismo, Baeta afirmó que de tener que reinventarse no sabe cómo hará debido a que tiene más de 40 años trabajando en la venta de este rubro y la verdad no cree que pueda cambiar de productos para vender. Esta situación es la de varios licoreros, quienes señalan que sus negocios ya existían en el lugar mucho antes de que edificaran las escuelas cercanas. Es responsabilidad de quien dio el permiso de construir una escuela, no de nosotros, que tenemos muchos años laborando en el mismo sitio, sostuvieron.

Por su parte, Daniel Pacheco, quien se mostró un poco incómodo con la encuesta, indicó que aunque está frente a una zona residencial, acotó que “toda Venezuela es zona residencial, a 200 metros de este negocio no hay escuela ni iglesia, por eso no creo que tenga problemas”.

Pacheco comentó que deben revisar quiénes están al día con sus impuestos y quiénes renuevan sus licencias puntualmente, “que para eso es que sí están pendientes, pero no creo que tenga que variar mis ventas o algo parecido”.

José Pérez, trabajador de otra licorería, aseveró que hasta ahora no ha tenido ningún tipo de inconvenientes con esa normativa, pero “si hay que reinventarse, este negocio es un frigorífico, en caso tal se podría eliminar la venta de licores”.

Los licoreros están a la espera de las respuestas de cada caso en particular, a fin de evitar que puedan cerrar sus negocio o deban cambiar los rubros para la venta.

FOTOLEYENDA
Los licoreros esperan que todo mejore. // Foto: Carlos Becerra