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miércoles, 20 de mayo de 2015

“Quienes condenan la crítica, son los que terminan vendiéndose a EEUU”

Tal Cual
20-05-2015
JUAN PABLO AROCHA / @JPArocha


El politólogo Nicmer Evans, dirigente de Marea Socialista, afirma que la revolución tiene pendiente el combate a la corrupción. Lamenta que se busque una "lealtad sumisa"

Son siete los artículos del Libro Rojo del PSUV –la biblia de los militantes revolucionarios– que habla sobre corrupción. La condena, pues en el ideario chavista sus militantes deben ser puros. Una promesa que quedó en el papel, y por la que las autoridades no han velado, admite Nicmer Evans, disidente del madurismo y creador del partido político Marea Socialista.

“La razón fundamental del génesis revolucionario era superar la IV República, como el germen de la corrupción, como lo viejo, el hecho de que se robaran en su propia cara los recursos”, advierte Evans, también politólogo. Lamenta que 15 años después la meta no se haya cumplido: “uno de los retos de este momento es cómo demostrar, incluso sabiendo que la corrupción es un problema cultural, que el proceso revolucionario realmente tiene la intención de luchar en contra de ello”.

Para Evans hay un problema de fondo dentro del Gobierno, se entiende mal el compromiso con el proceso. “Se presiona tanto para obtener una lealtad sumisa, que la posibilidad de la crítica, la contraloría social, de auditoría pública, está absolutamente mal vista cuando la persona cuestionada es parte de la cúpula, del protectorado”.

Defiende el dirigente de Marea Socialista la integridad de la mayor parte de la administración pública. Advierte, sin embargo, que el Gobierno manda un mal mensaje al silenciar las denuncias. “Esto hace que los ciudadanos terminen generalizando. Se manda además un mensaje, mientras estás en el cargo nada pasa, hay impunidad”.

Lo paradójico, observa, es que muchos de los que han pretendido levantar la bandera de la lealtad, “quienes condenan a los sectores críticos, son los que terminen vendiéndose al gobierno de EEUU en determinada circunstancia”

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