En el barrio San Vicente, frente al Destacamento 21 de GNB las calles están hechas un desastre

RAFAEL ORTEGA | el siglo
fotos | MARCIAL TOVAR

Enormes troneras se observan en la zona

Los conductores deben transitar por la calle con sumo cuidado para no dañar sus vehículos

Jorge Ramírez y
Arístides Quiñones

Justo al frente del Destacamento 21 de la Guardia Nacional Bolivariana en el barrio San Vicente de Maracay, lo que se observa son calles sucias y llenas de huecos, aparte de algunas veredas repletas de ranchos de zinc que forman parte de un sector conocido como Batalla de Niquitao.

Tal como ha sido reseñado muchas veces en los medios impresos y audiovisuales de la región aragüeña, este problema no es nada nuevo y la situación empeora cada día más.

Según el conductor de una unidad de carga, identificado como Jorge Ramírez, la calle ubicada frente al D-21 de la GNB está en pésimas condiciones y no se aguanta el mal olor que emana de las aguas negras que corren libremente por el sector y de los animales muertos que son lanzados entre los matorrales.

De igual manera, el transportista denunció que recientemente se efectuó la poda de varios árboles y dejaron las ramas tiradas en la vía pública empeorando la situación.

Otra de las irregularidades que se presentan en la zona son los constantes robos y atracos, en vista de que rara vez circulan las patrullas de la Policía de Aragua por allí.

Cuando transitaba por el sector, el ciudadano Arístides Quñones fue abordado por el equipo reporteril del diario “elsiglo” y expresó que este problema tiene muchos años y se originó a raíz de una invasión que hubo en la zona.

“Las aguas negras provenientes de los ranchos iban a parar a esta calle y deterioraron toda la vía”, afirmó.

Es por ello que Quiñones considera que este problema no podrá ser solucionado mientras no sea corregido el constante bote de aguas negras.

Finalmente, el ciudadano reconoció que la Alcaldía del municipio Girardot ha efectuado varios trabajos de asfaltado en la zona pero de inmediato se vuelven a dañar las calles por la situación anteriormente descrita.