Un retrato del libio Muamar Gadafi es retirado del hotel Radisson de Trípoli, uno de los más importantes de la capital de Libia | AP
EL UNIVERSAL
jueves 1 de septiembre de 2011 12:00 AM
Trípoli.- Saif al Islam, uno de los hijos de Muamar Gadafi, afirmó que todavía está en Trípoli y que la "resistencia continúa", en un mensaje sonoro difundido el miércoles por el canal de televisión Arrai, con sede en Damasco.
"Les hablo desde un suburbio de Trípoli. La resistencia continúa y la victoria está cerca", afirmó Saif al Islam, buscado por los rebeldes libios al igual que su padre, destacó AFP.
"Cada libio es Muamar Gadafi, cada libio es Saif al Islam... Combatan a todo enemigo y mercenario donde quiera que lo encuentren", agregó.
Saif al Islam advirtió además a los rebeldes que si intentaban atacar Sirte, la región natal de Gadafi, los esperan "20.000 hombres armados".
"Si los rebeldes creen que la batalla de Sirte será un paseo, en la ciudad se encuentran listos para el combate 20.000 hombres armados", afirmó.
Sin embargo, horas antes, su hermano Saadi calificó a los rebeldes libios de "hermanos" y dijo estar dispuesto a rendirse para "detener el derramamiento de sangre" en Libia.
"No tenemos ningún problema a que estén en el poder, los rebeldes son nuestros hermanos", afirmó, dejando a descubierto una división en el clan.
"Si mi rendición detiene el derramamiento de sangre, estoy dispuesto a rendirme esta noche", dijo Saadi Gadafi.
Gadafistas ignoran ultimátum
Las fuerzas leales al régimen de Gadafi ignoraron el ultimátum de deponer las armas impuesto por los rebeldes, que se preparan para avanzar hacia Sirte a más tardar el sábado.
Medios de la insurgencia reportaron en la noche del martes nuevos combates cerca a la ciudad de Bani Walid. Según los rebeldes, sus fuerzas repelieron un ataque de las tropas de Gadafi sin sufrir grandes bajas.
Los insurgentes han dado a los pobladores de Sirte un ultimátum hasta el sábado antes de lanzar una ofensiva militar. Después de Sirte tienen previsto avanzar hacia Sebha, otro de los bastiones restantes de Gadafi, ubicado en el desierto a 770 kilómetros de Trípoli.
Por otro lado, tampoco había informaciones claras sobre el paradero de Gadafi, del que se supone que abandonó Trípoli el viernes de la semana pasada. Medios árabes especulaban que el líder de 69 años podría esconderse en Bani Walid.
Según el canal Al Arabiya, la ciudad está actualmente bajo protección de los Warfalla, la más grande de las tribus libias. Un ex guardaespaldas de Khamis, uno de los hijos de Gadafi a quien reportaron como muerto el martes, sostiene que el exhombre fuerte de Libia consiguió huir a Sebha.
Argelia negó paso al líder
Gadafi habría intentado negociar con las autoridades argelinas su ingreso a Argelia desde la pequeña ciudad fronteriza libia de Ghadames, en donde se encontraría con miembros de su familia.
El coronel Gadafi y sus hijos desaparecieron desde la caída de Trípoli a manos del Consejo Nacional de Transición (CNT), órgano político de los rebeles, desde hace una semana.
Citando a fuentes cercanas a la presidencia argelina, el periódico francófono El Watan escribió que Gadafi había "intentado contactar por teléfono al presidente Abdelaziz Buteflika, quien se rehusó a tomar la comunicación".
"No es la primera vez que Gadafi y emisarios intentaron contactarse con el presidente argelino", según las mismas fuentes argelinas.
Argelia anunció que autorizó el ingreso a su territorio a la esposa (Safia) y a tres hijos de Gadafi (Mohamed, Hanibal y Aisha, que dio a luz a una bebé el domingo) por razones humanitarias.
Por la fuerza
Gadafi sigue probablemente en Libia, afirmaron altos mandos del CNT, y uno de ellos dijo que tienen derecho a matarlo si no se rinde.
"La información que tengo es ésta: es seguro en 80% que Gadafi sigue en Libia", dijo en Trípoli Omar Hariri, jefe de asuntos militares del CNT, añadiendo que el ex hombre fuerte del país es incapaz de hacer daño.
Atrapar a Gadafi es un objetivo vital para los rebeldes, pero siguen negociando para obtener la rendición de los últimos gadafistas en Sirte.
La cabeza de Gadafi tiene precio: 1,7 millones de dólares. Los rebeldes lo quieren vivo o muerto, aunque han señalado que si se atrapase le hará "juicio justo" en Libia.
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